PICO DE LAS BUITRERAS (17/02/2013)

Son las 6:50 y me acabo de despertar. Hoy tengo mi primera salida con el Club Aventura Alcobendas, nuestro nuevo Club y no puedo negar que estoy un poco nerviosito.

La ruta es subir al pico de las Buitreras en Segovia

Hemos quedado a las 8 en la Gran Manzana. Una vez preparado el termo con el café y lista la mochila, me despido de Cris, que no nos puede acompañar porque tiene partido, y salgo de casa.

Después de pasar lista y cuadrar los coches, salimos dirección a Riaza. Allí, en la Ermita de Nuestra Señora de Hontanares, punto de comienzo de la ruta, hemos quedado con el resto del grupo.

Ya todos juntos, nos preparamos y nos disponemos a comenzar nuestra ruta.

 

En la parte posterior de la Ermita sale una senda que cogemos y comenzamos con la primera ascensión del día por un camino bien marcado hasta un pequeño collado que ya nos ofrece unas vistas estupendas.

Aquí ya me he quitado parte del abrigo, que ya he empezado a sudar. En este punto comienza la nieve que ya no nos dejará en toda la ruta.También había algunos tramos con hielo pero que pasamos sin problemas.

En el collado hacemos nuestra primera parada para volver a reunirnos, cada uno ha hecho la subida a su ritmo. Desde ahora cada vez que llegamos a un collado o un pico hacemos esta parada, algo que me gustó mucho, a pesar del frío de la espera. 

Desde aquí se gira a la derecha hacia unas peñas con una cruz en lo alto.

 

 

Otra subidita y después se sigue el cordal en dirección sur, sin dejar nunca de subir. Se llega a una zona rocosa que atravesamos.

Aquí se nos complicó un poco la ascensión debido al hielo. Pero se soluciono haciendo unos peldaños con el piolet y poniendo un trozo de cuerda para ayudar a subir a los compañeros y evitar algún resbalón tonto. Vamos que no veía la hora de estrenar el piolet y a la mínima me puse al tema...

 

Paso a paso nos dirigimos al cerro Merino, al que ascendemos y llegamos más o menos 2 horas y media después de comenzar.

 

Desde el cerro Merino, seguimos la línea de cumbres con varios sube y bajas por el collado Cimero y el cerro de Calamorro.

Posteriormente se baja al collado de El Hoyo y se atraviesa la pradera de Zopegasdo.

Ya sólo nos queda la subida final al pico de la Buitrera.

Ya estamos arribaaaaa...

En este momento, el tiempo nos regaló una ventana de sol y nos permitió comer tranquilos. La tortilla y el café me sentaron de lujo y cuando me dí cuenta, ya era hora de ponerse nuevamente en marcha y regresar por donde habíamos venido, aunque con una variante final regresando por un precioso bosque hasta la Ermita.

 

Una vez en la Ermita tocaban las despedidas, ya eran las cinco y media y había que regresar a casa. Aunque había que despedirse como correspondía....

Sólo me queda daros las gracias a todos y todas por un día estupendo: Félix, Carlos, José, Luis, Belén, Patricia, Yolanda, Jesús, Silvia, Niko, Teresa, Alfonso, Luz, Javi, Guille, Elena y los demás, que debéis perdonar no me acuerde de vuestros nombres; para mí, eran muchos nombres en un sólo día y para eso soy un poco desastre.

 

Nos vemos en la próxima.



PONTON DE LA OLIVA

El viernes por la noche nos decidimos a hacer una rutita el sábado día 3 de febrero.

Después de mirar si tenía patatas y huevos para hacer la correspondiente tortilla, decidimos salir. Nos decantamos por una ruta circular en el Pontón de la Oliva.
 
Salimos de casa a eso de las nuevo y media y a las 10 y media ya estábamos listos para comenzar.

Remontamos el Pontón, para coger el camino que sale por detrás, bordeando el río Lozoya.

Con vistas que van cambiando y diferentes especies de árboles y vegetación, nos encontramos en el camino con vacas que sólo se limitaron a mirarnos y a no hacernos ni caso.

Seguimos nuestro camino hasta la presa de Navarejos donde paramos para beber un poquito de agua y leer los carteles que nos explican la historia de esta presa.

Vamos?, pues sí y seguimos hasta la Presa de La Parra.







Son las 12:30, pero como había hambre decidimos parar y probar esa tortilla y tomarnos un cafetito para quitarnos el frío.

Porque no lo he dicho, pero alternamos rachas de sol, con nieve, lluvia, viento... en fin que no sabíamos si quitarnos el abrigo, ponérnoslo o que.











En vez de volver por el mismo camino, decidimos, bueno convencí a Cris para cruzar el Lozoya y volver por la otra margen....



Después de una subidita maja, llegamos a lo alto del collado y decidimos que, como no sabíamos muy bien a dónde nos llevaba el camino que había elegido, sí lo elegí yoooo, pues que lo mejor sería ir dirección al Pontón, siguiendo pequeños caminos y sendas que en algunos lugares se perdían para aparecer nuevamente unos metros más adelante.



Esto nos llevó a afrontar una bajada muy pronunciada siguiendo los pasos de las vacas hasta llegar nuevamente al Lozoya.

Ya sólo nos quedaba llegar hasta el Pontón, cruzar al margen derecho del Lozoya y regresar a casa, eso sí parando antes en el Bar Manolo de Patones para tomar un cafetito y comprar un buen tarro de miel de esa que hacen las abejas madrileñas.

Nos vemos en otra.